La foto que nunca hice (y que nunca volverá)(I)

Al ser esta la primera entrada sobre este tema de fotografías no hechas, no logradas o no conseguidas, todavía no he podido crear una opinión propia sobre lo que querría haber hecho hace dos días, dos semanas o dos años. Lo que si se es que hay miles de fotografías que no he podido hacer, y que nunca volverán.

Si bien ha habido veces que estas fotografías no han podido ser captadas por una cámara ya que en ese preciso instante mágico no ha habido una cámara en mis manos bien por el olvido, la dejadez, el ser un vago redomado o el simple hecho de no poder hacerla en ese momento, mi retina si ha detenido ese instante, pero, y esto es lo que me llevo a querer ser fotógrafo o al menos a querer hacer fotografías, estos instantes no duran mucho en la parte de mi cerebro que debería almacenarlos.

Otro factor es también que comencé a captar imágenes en un periodo bastante tardío, la adolescencia, madura adolescencia mas bien, así que en realidad la mayoría de las fotografías que quise hacer y no pude y por ello nunca volverán a presentarse, son de mas allá de cuando puedo recordar, que es bien poco.

Estas son las razones por la que esta primera intervención en el apartado de fotografías nunca hechas de este blog, no quiero dedicársela a una sola fotografía, sino a todas aquellas fotografías que se quedaron atrás y que jamas volverán a presentarse.