31/8/13

Quieres o Amas

Roland Barthes / 1915 -1980

Crítico, ensayista y semiólogo francés. Fue uno de los principales representantes de la nueva crítica o crítica estructuralista.

Su carrera como teórico y estructuralista fue extensa, y siempre revuelta, pues sus puntos de vista sobre música, arte, cine o fotografía respondían a nuevas críticas siempre cambiantes en su viaje intelectual.


Barthes murió en la primavera de 1980 tras ser atropellado en la Calle de las Escuelas, frente a la Sorbona. Su último libro La cámara lúcida sobre la fotografía, salió por esos días

En esta pequeña joya, Barthes desarrolla si idea de la fotografía como huella de la realidad, como marca en el tiempo. La experiencia de la muerte de su madre traslada a Barthes a su estado de ánimo y el traslada este a la teoría de la fotografía. Por ello, fotografía y muerte son los dos temas indisolubles del libro.

Es una obra muy personal en la que se deja llevar por sus propias sensaciones y la búsqueda de la esencia de la fotografía a través de lo que sería un pensamiento objetivo, así como por la idea de que la fotografía sólo adquiere valor con el paso del tiempo, pero en el caso de Barthes este valor también viene cuando se produce la desaparición del referente y la muerte de la persona fotografiada.


Da inicio a su discurso recordando que la fotografía repite los instantes irrepetibles. La fotografía lleva siempre su personaje consigo y están marcados por la misma inmovilidad amante o de muerte, además Barthes confiesa que lo que realmente le interesa es ahondar en la fotografía como se mete un dedo en una herida abierta, y no abordarla como si de un tema de la escuela que estudiar se tratara.


Barthes afirma que la fotografía tiene dos elementos que son el studium y el punctum, el studium tiene que ver con lo que nos atrae según nuestra cultura y nuestros gustos, y el punctum tiene mas que ver con las cosas que sentimos sin tener razón para ello, los sentimientos que afloran sin saber exactamente porqué. Barthes considera que el punctum de una foto es lo imprevisto que en ella sobresale.


El punctum muy a menudo es un simple detalle, puede ser mal educado por lo que puede ser interpretada de distintas formas, llegando a situaciones en las que puede inundar una fotografía por completo. Por otra parte el studium, está siempre codificado, esta sujeto a nuestra educación o nuestros valores así como a nuestros gustos o aficiones. El punctum es una implementación inconsciente, algo que añado a la fotografía, pero que ya se encontraba en ella previamente. 



Barthes busca incesantemente en qué se diferencia el referente de la fotografía de otros sistemas de representación. Es así como llega finalmente a pensar de manera objetiva en lo que a fotografía se refiere. Lo que está claro entonces es que la foto hace al referente resaltar. Toda fotografía es un certificado de presencia. A juicio de Barthes es la llegada de la fotografía lo que divide la historia del mundo y no el cine. Barthes señala así mismo hay que interrogarse sobre si la fotografía es analógica o codificada. En la foto el poder de autentificación prima sobre el poder de representación.

 Luego menciona una serie de características también de la fotografía: La imagen fotográfica está llena, abarrotada: no hay sitio para ser añadido algo. La fotografía excluye toda purificación. En la fotografía, la inmovilización del tiempo sólo se da de un modo excesivo. La fotografía es violenta porque llena a la fuerza la vista y porque en ella nada puede ser rechazado, ni transformado. El tiempo es el desgarrador énfasis del pensamiento objetivo, su representación pura. En la fotografía se mezcla, de alguna forma, el pasado y el futuro. Por ejemplo cuando habla de la fotografía de su madre dice: ella va a morir y ella ha muerto. Cada uno lee la fotografía como quiere. La fotografía no sabe decir lo que te va a ofrecer ver. En el fondo, una fotografía se parece a cualquiera excepto a quien representa, a veces hace aparecer cosas que nunca se perciben. La fotografía mira directamente a los ojos. La mirada es al mismo tiempo efecto de verdad y efecto de locura. Barthes ve a la fotografía como una forma de alucinación.

Barthes cree que existe una especie de vínculo entre la fotografía, la locura y lo desconocido. La fotografía puede ser loca o cuerda .Existe otro punctum que no está en la forma sino que se encuentra en el tiempo. Dice que la fotografía es un objeto de deseo o de odio. Escribe sobre qué es lo que puede hacer que nos interesemos por una foto: Se puede desear al objeto, el paisaje, el cuerpo que la foto representa; ya sea amar o haber amado el lo que reconocemos en ella, o asombrarse de lo que se ve en ella.

Una de las cosas que claramente queda plasmada en esta obra, es que toda imagen y fotografía, comenzando por lo que principalmente lo ha movido a escribir la obra, lo mantienen unido a ellas por los sentimientos que le inspiran o recuerdan. La fotografía capta instantes ya pasados, movido por el tema general de la Muerte, el autor nos habla de ese sentimiento del ser que fue y que tal vez ya no esté, pero que continua siendo en la imagen.
También habla de la fotografía como arte, incluyendo al cine. La fotografía puede ser un arte,siempre y cuando no haya demencia en ella, y su esencia no actúe demasiado sobre mí. El cine participa de esta costumbre de la fotografía o al menos el cine de ficción, un film puede ser demente por el ingenio, presentar los signos culturales de la locura, pero nunca lo es por propia naturaleza. Es una ilusión, su visión es meditativa. 


Prácticamente al final de este texto, Barthes explica cómo la imagen influyó y sigue haciéndolo en la sociedad, en su vertiente más icónica, simbólica y representativa: Lo que caracteriza a las sociedades llamadas avanzadas es que tales sociedades consumen en la actualidad imágenes y ya no, como las de antaño, creencias; son más liberales, menos fanáticas, pero también más falsas y menos auténticas , cosa que nosotros traducimos, como si la imagen al hacerse de todos produjese un mundo sin diferencias.


Hay, por lo tanto, en este mundo cubierto y saturado de imagenes, algunas que despiertan en nosotros un estado de alerta, estas serian ''To like'', y por otra parte, para mi la mas importante, estan aquellas en las que nos detenemos, auqllas que despiertan sentimientos en nuestro cerebro, nuestro corazón y nuestra alma, fotografias que nos obligan a cerrar los ojos y crean la necesidad de guardarlas en ese rincon de nuestra memoria reservado ''To love''



''to like''
Aquí presento la selección de imágenes que puedo recorrer durante minutos, pero que aun así no llegan a alcanzarme el alma o el corazón.
Willy Picard


Harry Calahan

William Eggleston
Eric Mencher

''to love''

Para este apartado he reservado las fotografias que me disparan directamente en el centro del alma, imagenes en las que podria estar abstraido segundos, minutos, horas, años, y aun asi no sabria decir exactamente porque las estoy mirando tan detenidamente. Imagenes donde el punctum quiza no lo sea asi para todo el mundo, o quiza muchos lo compartan conmigo, pero aun asi, no puedo evitar sentir que, cuando me encuentro frente a frente con una de estas, desaparezca el mundo y la fotografia me envuelva por completo.

Trent Parke


Sally Mann
Mareen Fischinguer
Masao Yamamoto

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